sábado, 11 de febrero de 2012

Hermosa nieve




Veo la nieve desde mi ventana, Hacía más de un año que no la había podido ver, tocar, sentir

Mis pasos quedan marcados, abrazados a su belleza

Permanecerán así mientras dure su efímera presencia. Íntimamente unidos, como en un beso eterno. Seguirá llegando a mi alma y poco a poco me cubrirá, me incorporaré a su esencia y renunciaré a la mía.

Han desaparecido casi por completo esos pasos de mi alma sobre su alfombra. Nuevos copos han reafirmado nuestro amor. Pero sé que estoy, sé que sigo siendo.

Dentro de ella, mi felicidad es sublime. Se ha borrado mi alma, pero también la suya. Ahora somos una única y maravillosa realidad que palpita al ritmo lento de lo que creemos eterno, de lo que deseamos que lo sea

Es hermoso tener algo de lo que no eres dueño, pero que se adueña de ti. Disfrutar de lo que sabes puede acabar, pero no ahora. 


Tal vez cuando salga otro Sol, pero quizás tampoco entonces.

Qué importa, si la felicidad es inmensa, solo por estar así, dejándome envolver por tu cálido abrazo. Una nueva vida. Tal vez efímera, tal vez eterna

Deseo tenerte para siempre. Conservar tu alma. Disfrutar de tu presencia. No puedo evitar mis impulsos. Sé que llegará el fin, acabará el sueño. Debo intentar ….

Suavemente tomo una pequeña parte de ti. Mis manos la rodean amorosas. Cierro mis ojos grabando en mi mente todas las sensaciones que me has transmitido, ese permanente estado de orgasmo, esa felicidad inmensa. Ese …

Escapas de mis manos como lágrimas entre mis dedos. Aquella cálida sensación se convierte en frío. La luz en oscuridad. Lentamente se rompe el encanto. Vuelvo a la realidad

Tal vez mañana, u otro día, otro año, vuelva a envolverme ese blanco lienzo, esa nieve que es vida. Pueda descubrir nuevos detalles, nuevas formas, bellezas semiescondidas

Cada día nervioso y anhelante me dirijo a la ventana. Tardo nos segundos en abrir mis ojos. Llega la decepción. Hoy tampoco has venido. Miro al cielo. Brilla con ese azul que te favorece, que resalta tu blanca belleza, que te hace aún más deseada

Quedan algunos vestigios de tu última visita, Los contemplo mientras el frío me atenaza; solo me queda pensar que te he tenido, que me has rodeado, abrazado, amado. Cierro los ojos recordando como te deslizabas de mis manos y mientras un cálido canto se deslizaba por mi cuerpo

Te has ido pero volverás. Lo has grabado en mi piel, lo has depositado en mi alma. Yo te esperaré, aún nos queda mucho invierno


Seguiré esperándote al amanecer